miércoles, 13 de abril de 2022

#HaceloPosible ✊ Capítulo 7: Cómo mantener activas las redes de mi emprendimiento | Parte 1 👩‍💻

Hace poco contamos desde las redes sociales de OH que tuvimos un verano de temporada alta de capacitaciones de las cuales muchas fueron sobre contenidos y redes sociales. Pues bien, una vez finalizadas las clases, o poco antes de la despedida, llega la pregunta del millón ¿Cómo hago para sostener las publicaciones en mis redes? A esa pregunta siguen otras: ¿Tengo que publicar todos los días? ¿Y si no tengo tiempo? ¿Me dejan de seguir si no posteo todo el tiempo?

Si bien cada caso es particular y nuestros cursos y mentorías muy personalizados, hay algunas cuestiones que las podemos tener en cuenta para todos los emprendimientos. Por eso, elaboramos una lista de ítems que pueden ser de gran ayuda a la hora de llevar adelante el ecosistema de redes de un proyecto independiente 


#SpoilerAlert: Esta es la primera parte y muy pronto habrá segunda ;)




1 - Honestidad brutal: Sé honestx con vos mismx en relación a los temas que vas a publicar. No te comprometas a producir contenidos que no están dentro de tus posibilidades. Tampoco te obligues a escribir o generar audiovisuales sobre temáticas que, a priori, tenés la certeza que no podés sostener. Hacé que tu lista de temas sea posible, como el nombre de este espacio ;) 


2 - Decile no a publicar sin ganas: Todes tenemos momentos en euforia digital, esos ratos en los que nos brota la onda para armar contenidos. Aprovechá ese tiempo y generá varias publicaciones que no es necesario subir todas a la vez sino que podés programarlas en distintos días y horarios. Por el contrario, cuando sentís que no da es preferible no tocar las redes y esperar. 


3 - Distribuí tus energías: Dedicale un tiempo determinado a las redes sociales. Decidí cuál es el espacio que le toca a esa tarea y, si es necesario, asentarlo por escrito. Determiná días, horarios, tiempos, momentos y luego cumplilo. No hagas de las plataformas tu mochila permanente porque eso solo contribuye a generar desgaste. 


4 - Acá sí bancamos la zona de confort: Si tenés un tema “caballito de batalla” dale para adelante sin dudar. Estamos hablando de esas temáticas que te salen de memoria y que no te requieren esfuerzos. Si, además, tu audiencia ama estas publicaciones con mucho más razón convertirlas en el centro de tu calendario de publicaciones y recurrí a ellas siempre que lo necesites


5 - Acortá el camino: Utilizá los recursos que te ofrecen las redes sociales. Algunos ejemplos de esto son las historias, en las que muchos emprendedores interactúan con su audiencia para conocer sus intereses. De ese intercambio pueden surgir publicaciones. De igual modo, podés vincularte virtualmente con otres emprendedores para generar alianzas y tener temas de posteos. 


En el próximo capítulo de #HaceloPosible se vienen 10 tipos más para sostener la actividad en redes y no morir en el intento. Mientras tanto pueden poner estas primeras 5 en práctica y también dejar comentarios con sus propias técnicas de creación de contenidos. 


Fernanda Santágata 


martes, 18 de enero de 2022

#HaceloPosible ✊ Capítulo 6: Tips para negociar honorarios🤑💸

Este es el primer capítulo de #HaceloPosible de este año y la propuesta ir por todo ¡Porque para eso somos una comunidad de autogestión! Por eso hoy comenzamos con un temón. Pero antes, una confesión. Esta es la parte que más me costó en mi camino como emprendedora y, por mi experiencia como capacitadora y mentora, suele ser una dificultad muy frecuente para todes. En mi opinión hay un tema tabú en la sociedad con el dinero que se traslada a la complicación que sienten los freelancers al momento de poner precio a su trabajo. En capítulos anteriores hablamos sobre la falta de valoración que muchxs sienten por parte de su entorno personal y vimos algunos tips para revertir esa traba emocional. Sin dudas, una buena negociación, y un acuerdo justo de honorarios, contribuye a mejorar el bienestar de los emprendedores en todos los sentidos, incluso en los aspectos sociales y emocionales. 

 Pero ¿De qué hablamos cuando decimos honorarios? Es el costo que tienen los servicios, tareas o mano de obra de profesionales y que se acuerdan por adelantado con quien está interesado/a en la contratación. Al momento de cerrar el acuerdo se establecerá un nuevo vínculo y será de proveedor y cliente. En esta relación siempre lo más recomendable es que las reglas y condiciones queden establecidas por escrito bajo el consentimiento de ambas partes. 


Ahora bien, para llegar a este punto fue necesaria una conversación con final feliz. Para que ese diálogo fluya, y la magia suceda, existen algunas ideas  muy útiles para tener en cuenta:

1 - Nadie apurado gana una negociación:

Saber esperar significa saber negociar. No, no es una frase de póster, es la técnica número uno para obtener una buena ganancia en un acuerdo. Dejar la ansiedad de lado (¡Por más que sea el cliente de tu vida!), mostrar interés pero jamás desesperación. No avanzar nunca más rápido que nuestro/a interlocutor/a.

 

2 - El arte de dejar hablar: 

Saber escuchar, sí, pero también dejar que la otra persona hable, se exprese y, por qué no, haga catarsis. Quien solicita un servicio, en el fondo, pide una solución para una necesidad. Es muy probable que para él/ella, además, esto signifique un problema. Esperar que termine de decir todo lo que salga de su alma y luego, en base a la escucha activa, ahí sí, comenzar a ofrecer beneficios. 

 

3 - El precio de tu trabajo lo pones vos:

Está muy bien consultar con colegas a modo de referencia, pero referencia no significa límite. Si otrxs colegas cobran mucho menos por igual servicio, pero a vos no te cierra entonces no tiene sentido que uses ese estándar para cotizar. Primero preguntate si tenés buenas razones para pasar honorarios más altos. Si la respuesta es sí, adelante. Si la respuesta es no, de todos modos no te va a resultar útil un presupuesto inferior a lo que necesitas ganar por las horas, energía y disposición te va a demandar ese trabajo. Así que tus servicios, tus números. 

 

4 - El truco de los cierres parciales:

Vale para un diálogo de honorarios de forma personal o por escrito y se trata de una técnica que se usa mucho en el mundo de las ventas. La idea general es que es muy poco probable que, ante una consulta inicial, se pueda cerrar una venta en un solo intercambio. En general, lo que sucede es que lxs consultantes inician una conversación en la cual harán muchas preguntas. Entonces el secreto es ofrecer ayuda y generar intereses en cada respuesta para, a cambio, obtener un sí parcial. Al final del recorrido, con un reconto de todos los sí será mucho más sencillo obtener un cierre final. 

 

5 - Todes aman las soluciones:

Otra vez la escucha activa en primer plano. Esta técnica es fundamental para detectar cuales son las necesidades reales que tiene la persona que consulta por un servicio. A partir de ese relato el consejo es brindar soluciones puntuales y concretas para lo expresado por el/la futuro/a cliente/a. Si tenemos algo genial que esa persona no pidió lo podemos mencionar como un extra al final pero es fundamental concentrarnos en el pedido que nos hicieron. 

 

6 - Honorarios siempre inversión, nunca gasto:

Tal vez suene a detalle menor, pero no lo es. La forma en la cual se habla de los propios honorarios es clave para cerrar un buen acuerdo. Lo que cada emprendedor/a tiene que comprender e internalizar para que fluya de modo natural es que sus honorarios son una inversión para sus clientes y no gastos. A clientes no les “cuesta”, INVIERTEN. Los servicios no tienen “precio” sino que poseen un VALOR. El peso de las palabras es muy importante siempre y mucho más cuando hablamos de dinero. 

 

Fernanda Santágata 

 


martes, 21 de diciembre de 2021

#HaceloPosible ✊ Capítulo 5: Los emprendedores no tenemos fin de año

Cobrar, facturar, entregar pedidos, responder reclamos (aunque sean injustos), atender llamados, contestar Whatsapp hasta cualquier hora, chequear stock, reponer stock, inventarle horas al día, confirmar que trabajamos el 24, confirmar que trabajamos el 31, buscar refuerzos, pedir manos prestadas, hacer malabares… 

¿Cómo viene tu fin de año? ¿Otra vez estás haciendo lo que el año pasado dijiste que no ibas a hacer el próximo diciembre? Del 1 al 10 ¿Nivel de autoexigencia y, porque no, autoexplotación? 


Confirmado: En la autogestión no hay fin de año. Lo supimos siempre, lo confirmamos en cada cierre de período ¿Porqué? Porque el sistema no nos beneficia y nosotrxs, a veces, estamos muy solxs a la hora de tomar decisiones difíciles y estresantes. Entonces, para esto también, existe nuestra comunidad #HaceloPosible 



Algunas cosas que aprendimos en casi una década de autogestionar, van enlistadas a continuación un poco como catarsis y otro poco para producir un protocolo de fiestas que nos quede para siempre: 


1 - Practicidad y pragmatismo: no es momento de arreglar ni solucionar la vida sino de pasar diciembre lo mejor posible. Eso incluye, por supuesto, vender todo lo que se pueda y aprovechar la temporada alta. Vamos a lo que funciona. Si sos obse por la perfección entonces es buena idea anotar todo eso que se te ocurrió para ponerlo en práctica desde el verano y, tal vez, armar un plan de acción para el próximo fin de año. 


2 - No te enganches: es casi inevitable que en estas fechas sucedan movimientos negativos. La mayoría de las veces seguro que no se trata de malas intenciones, son solo los nervios del momento. No discutas con colaboradores, proveedores ni clientes. Tomá nota y retomá la conversación cuando pasen las fiestas. Lo ideal es armar una guía para trabajo en equipo durante épocas de mucha exigencia y, tal vez, lo puedas pensar para tu próximo pico de actividad. 


3 - Amigate con el Excel: en realidad podría ser amigate con la tecnología en general. En diciembre, necesitas soluciones y las aplicaciones, programas y plataformas las ofrecen. Si sos anti todo te invitamos con amor a que lo consideres para 2022 porque la exigencia en la autogestión va en aumento y los avances tecnológicos existen para ayudarte a pasarla mejor. 



4 - No es tiempo de tomar decisiones: Es probable que en algún momento colapses y te pinten las decisiones disruptivas.Por favor no lo hagas y esperá a enero. Si sos del grupo privilegiadx que se toma vacaciones durante el verano, entonces que sea después del descanso. Si no tenes receso, igual los primeros meses son mejores para reflexionar. Cualquier cosa es preferible antes que meter cambios durante la euforia de diciembre. 


5 - Andá a lo seguro: Es momento de maximizar la eficiencia. Muchos y muchas están full ventas y facturación y, desde luego, eso es la prioridad. Entonces no experimentes. Ese tip mágico que te pasaron dejalo para otro tiempo más tranqui. Ahora no arriesgues, no innoves y andá por todo.


6 - Dejá pasar la ola: Este diciembre, como todo, también pasará. Pensas que es el fin, que no podés más y que en enero comenzarás a mandar CV para volver al horario de 9 a 18 de lunes a viernes. No te vamos a convencer de lo contrario, solo te proponemos esperar unos días. En enero, al lado de la pile, con algo fresquito y de nuevo con los pies en la tierra todo será más fácil de resolver. 


Fernanda Santágata